lunes, 7 de julio de 2008

¡¡EMOCIÓN EN ESTADO PURO!!

A estas alturas, ya no puedo ocultar que me gustan las emociones que se viven con el deporte.

Ayer, lo de Nadal y Federer fue algo épico...yo, desde luego no recuerdo haber vivido nada igual en mi vida...qué tensión, qué fortaleza, que capacidad de lucha y al final, qué saber ganar y qué saber perder; y todo ello a pesar de la lluvia, las casi 5 horas de partido...y del agotamiento.

Cada punto era un derroche de fuerza y de templanza. En ningún momento les ví flaquear...Nadal tuvo el partido varias veces en su mano...no remataba...pero no se venía abajo. Federer, a pesar de perder los dos primero sets, supo remontar, aguantar....Todo ellos con un tenis espectacular en el que cada golpe era una lección de maestría.

Reconozco que sufrí bastante, porque, yo iba con Rafa, por ser español; pero Federer, me encanta, como jugador y como persona. En cualquier caso, los dos me impresionan.

Federer se considera a sí mismo como alguien sencillo, familiar, católico con fuerte fe. Dedica gran parte de sus ingresos a causas humanitarias en África, también colabora habitualmente con Unicef.

Este joven de 26 años podría estar "endiosado" debido a su trayectoria como tenista, ha ganado todo...es el número uno, sin embargo, su saber estar y su "elegancia", demuestran que el concepto que tiene de si mismo se corresponde ciertamente con la realidad. Yo, me quito el sombrero.

Sobre Nadal, la verdad es, que tampoco se queda corto. Con 22 años es un joven ejemplar; humilde, trabajador, sabe saborear su victoria sin grandes alardes ni aspavientos..., comedido, educado, felicita al rival y reconoce que tiene mucho que aprender todavía de él, a pesar de haberle ganado de una forma tremenda.

Como en muchos otros deportes; es cierto que les envuelve una nube de dinero, publicidad y despilfarre...sin embargo, en el fondo, pesa más la humanidad de estos dos jóvenes que a diferencia de otros deportistas dan un gran ejemplo y demuestran que las cosas se conseiguen a base de esfuerzo, paciencia, fe y humildad.

Jamás les he visto involucrados en escándalos, ni hacen negocio con la prensa del corazón, poco se sabe de su vida personal y en cada partido, se dejan la piel, como si fueran unos perfectos desconocidos que deben abrirse paso en el mundo del tenis.

Mi más sincera enhorabuena a los dos...hay días en los que, a pesar de los trofeos...la victoria no es sólo de uno.

4 comentarios:

CRIS dijo...

Nosotros estábamos en la Sierra de Madrid y cuando volvimos a casa a eso de las 10:30 de la noche, la carretera estaba fina...

¡¡¡Imposible separarse de la tele!!!

Estoy contigo...al final...todos suspiramos con la victoria.

Un saludo Luisa

Anónimo dijo...

no vi el partido, pero me alegro sobre todo del juego limpio, eso sí que es bonito

CRIS dijo...

Lo del juego limpio se queda corto con estos dos chicos.

Fue tremendo, porque en total fueron como 7 horas pegados a la tele...de volverse loco...y con tantas cosas por hacer; pero mira, mereció la pena, no sólo por el final.

Un saludo

lojeda dijo...

Tienes razón, el partido fue emoción en estado puro, alegría para España por tener un deportista tan joven, y con esa categoría moral, y por Federer, que además de ser el numero uno en el tenis mundial, es un caballero de la cabeza a los pies, además de guapísimo.
Un abrazote cariñosozjzd