jueves, 15 de abril de 2010

LUCHA


Siento la ausencia de estos días...a veces es inevitable ausentarse aunque uno no quiera. En los ratos de ausencia se acumulan las vivencias, los momentos y las palabras para compartir...en resumen, la vida...

La vida de un Polo Positivo es complicada, porque convive cerca del Polo Negativo y, curiosamente, se siente irremediablemente atraído hacia él...¡Es una auténtica lucha por no claudicar y caer en sus garras!...sobre todo, por demostrar que es el lado fuerte del imán, pero...

La vida, la vida, la vida.

Estoy en un momento en que se me hace muy presente que en ella todo es lucha, lucha y lucha; lucha por el trabajo, lucha por los hijos, lucha por la familia, por los valores, por el respeto, por la paz, por estar alegre, por ser feliz, lucha por cualquier cosa...hasta para pagar en el supermercado o subir al autobús.

¿Pero son estas luchas cotidianas un luchar por la vida? Esto puede ser muy ambiguo, sobre todo, muy opinable y matizable.

Me doy cuenta de que una cosa es la lucha por la supervivencia, ese instinto que todo animal tiene, que está en nuestro código genético y que no nos cansamos de ver en los documentales de la tele; y otra muy distinta las luchas que hay que emprender cada día por conquistar pequeñas metas...

Me veo buceando para intentar hacer un ancho de la piscina de tirón; aleteando torpemente, con los mofletes llenos de aire y pensando que ya no puedo más, hasta que finalmente toco el extremo opuesto de la piscina, saco la cabeza y tomo una gran bocanada de aire (si hay público, es aún más gratificante). Supongo que todos habéis experimentado esto.

Vivir, en el sentido biológico de la palabra está ligado absolutamente al oxígeno...está claro. Ahora bien, en la vida, hay muchas parcelas que necesitan del oxígeno para subsistir y ese oxígeno no está en aire, sino que hay que fabricarlo y administrarlo correctamente para que no se agote...y si se agota, crear más.

Así funciona la cosa o diciéndolo de otro modo...la vida es un don, nos viene dada, no depende de nosotros...pero vivir, es algo que cada uno debe esforzarse por hacer, construir el día a día, está en nuestras manos.

Ahora nos cuentan que si algo en nuestra vida no nos gusta, nos incomoda, no nos conviene, o volviendo a la metáfora del oxígeno..."nos falta el aire", lo que debemos hacer es cerrar la válvula, matar al "bicho", enchufar el respirador a otra máquina, y así sucesivamente.

Efectivamente, parece que hay cosas que no se discuten. Cuando la supervivencia está en juego, cuando se trata del aire que respiramos luchamos por él con uñas y dientes...por instinto o por voluntad...pero luchamos. Sin embargo, en las parcelas en las que el oxígeno hay que fabricarlo, es decir, que se puede ir tirando del hilo, y que el único modo de preservarlas es mediante un ejercicio constante de voluntad y uso de la libertad, entonces, nos conformamos con la mínima o tiramos la toalla.

Nos han vendido la moto, pero la realidad, es que, cada vez que cerramos una válvula, algo muere en nosotros irremediablemente.

En esto, la vida y el vivir...son iguales...es por ello, que son de algún modo, inseparables. Ahí el engaño, ya que, cuando dejamos morir algo en nuestra vida, nosotros, de algún modo, también morimos... ¿o no es cierto?

Con este post...doy pie a muchos otros posts que quisiera ir escribiendo en estos días, porque a esto, habría mucho que aportar, mucho que matizar...y sobre todo, mucho que contar.

Y es que yo no sé cómo tendréis vosotros las bombonas...pero yo, algunas, bajo mínimos.

3 comentarios:

Militos dijo...

Querida Cris. yo también estoy a mínimos y no sé por donde tirar. me muevo mucho mejor en la piscina.
Gracias porque con tu post he descubierto lo que me está pasando: falta de oxígeno.
un beso grande.

mañana el papa cumple 83 años, démosle un poco de oxígeno con nuestra oración. si puedes felicítale por imail

Luis y Mª Jesús dijo...

Lo imprimí para leerlo despacio, con oxígeno porque la vida ordinaria solo me deja respiraciones suaves casi sin mover el diafragma.
Hoy comentábamos Luis y yo que si hay que dejar la piel por defender la verdad, pues vale, pero que te tengan ahogado por mantenerse a flote....
Me has hecho reflexionar. Gracias.
Un besazo
P.D. Los del testimonio son del Camino

TORO SALVAJE dijo...

Hace tiempo que las tengo bajo mínimos.
Respiro con muy poquito aire.
No quiero asfixiarme.
Es difícil vivir.
Al menos para mí.

Besos.