Esta mañana me estaba acordando de la película "Tomates verdes fritos", que si no habéis visto, os recomiendo.
En ella se dice, al hilo de una situación, la siguiente frase: "El secreto está en la salsa", tenía un doble sentido...o más bien, un sentido irónico, pero yo me sirvo de ella para darle otra vuelta de tuerca y os planteo lo siguiente...
Supongo que a todos os habrá pasado en alguna ocasión eso de preparar una plato y que los comensales queden encantados y te digan: "Me tienes que dar la receta...".
Pues bien, si la vida fuera una olla llena de macarrones...¿Qué receta creéis que los convertiría en algo único, irrepetible y delicioso?
Ayer nació mi primer sobrino...es un niño muy deseado ya que mis cuñados llevan casados once años y es su primer hijo, ¿No creéis que es una salsa muy especial para sus vidas? Pero por otra parte, yo miraba al bebé y me decía...Realmente eres un pequeño macarrón...¡estás al dente! y con todo un mundo de cosas por delante que harán de tu vida algo muy precioso y especial...
Somos a la vez salsa, macarrón, cocinero y comensal....
Cuantas posibilidades, ¿no?
Sin embargo, creo que todas ellas encierran su "secreto".
Os dejo aliñarlo y luego, me pasáis la receta...
Jajaja, ;)