jueves, 21 de mayo de 2009
DESDE LA FE
Esta semana está siendo intensa...¡¡y digo "está siendo" porque aún no ha acabado!!
El martes por la noche estábamos cogiendo un coche cama en el tren para viajar a Galicia, pues había fallecido una tía de mi marido...y ayer mismo, el Talgo de vuelta a Madrid...para no organizar mucho lío en casa con los cuatro pequeños.
Por otra parte, el sábado hace la Comunión nuestro hijo mayor..y, en fin...hay que atar cabos sueltos por todas partes, aunque gracias a Dios y a la inestimable ayuda externa de mis padres, hermana y demás...creo que tengo todo listo.
Son dos acontecimientos totalmente contrapuestos, al menos, en lo que a sentimientos se refiere, pero para mí, la manera de vivirlos puede cambiar radicalmente todo haciendo incluso que se aproximen; todo dependerá de si el punto de unión es la FE.
Una muerte, un sufrimiento, una enfermedad...¡¡Qué distinto es vivirlo desde la óptica del encuentro con Dios, desde la esperanza, desde la entrega y el amor incondicional a esa persona que padece...a vivirlo desde el vacío, la razón y los silencios !!.
Acontecimientos así, nunca, creo yo, se pueden vivir con alegría desbordante, porque el lado humano también tira y mucho...y los afectos están a flor de piel. Mucha gente no tiene fe y la incomprensión que produce el ver cómo un ser querido, a veces joven desaparece de repente...es algo, que no sólo no les acerca a Dios, sino que les aleja definitivamente.
Hay seres humanos que desde que nacen viven en un sufrimiento profundo...muchos incluso, no llegan ni a nacer, pues les hes arrebatada la vida en el vientre materno. Todo esto es fruto de la libertad del hombre que, debido a muchas circunstancias...se inclina por el mal...y el mal, no es cosa de uno, sino que afecta a todos los que están alrededor.
¿Qué sentido tendrían entonces todas estas vidas si su único destino fuera el horror y la muerte definitiva?
Por otra parte, una persona que viva su vida intensamente, que haga el bien, que procure amor y de frutos...¿qué sentido tendría que muriese definitivamente si toda su vida es provechosa para los demás y para ella misma?
La fe otorga la perspectiva de la "continuidad"...de saber que todo sufrimiento y toda muerte, aunque sea de personas inocentes y buenas, no es el fin de nada, sino el inicio de una verdadera existencia en plenitud, donde el amor pueda experimentarse si no se ha experimentado...y pueda seguir derramándose, de una forma, aún más intensa, en aquellos a quienes has y te han amado.
Es muy diferente un entierro y un funeral que se hace cómo algo "socialmente correcto" a una celebración en la que el amor es el motor y el hilo conductor de todo, donde, a pesar de la tristeza...prevalece la alegría de la esperanza en una vida mejor.
La Comunión, como decía, nada tiene que ver...para el niño es un día especial, en el que humanamente hablando, tiene la ilusión de saberse el protagonista, la alegría de ver cumplido algo para lo que se ha estado preparando durante mucho tiempo, es la ilusión de verse con su traje elegante, la emoción porque espera regalos...en definitiva, un momento feliz.
Al igual que en el otro acontecimiento, sería absurdo quedarse sólo en esto...porque lo que se celebra, en realidad es otra cosa, por eso es muy necesario, creo yo, no privar al acto de su trascendencia y valor real...porque si no, tampoco tendría sentido el celebrarlo.
Recibir por primera vez la Comunión, es recibir el alimento y la llave para que el alma descubra el camino hacia el verdadero amor y el sentido profundo de esta vida...
Es algo que va mucho más allá de la razón y la afectividad...es algo que transforma sin que nos demos cuenta y nos abre una puerta...
Así vivo yo los dos acontecimientos, porque las personas somos capaces de lo mejor y de lo peor...pero para Dios...todo es posible y su amor, cambia la perspectiva de las cosas, dándoles la óptica más maravillosa.
Os dejo dos recomendaciones con las que se puede profundizar en todo esto que me viene a la cabeza...
La primera es la lecutra del libro Mala Tierra, de María Vallejo-Nágera...en el que a través de un estremecedor testimonio real, se puede ver como Dios hace bien las cosas...y cómo salva...
La segunda son un par de vídeos que me han llegado al correo y que son también, un estremecedor testimonio de la "victoria de la fe sobre la muerte", a pesar del sufrimiento.
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7 comentarios:
Hola Cris, la fe es el tesoro más valioso, lo que ocurre es que la fe es un don gratuíto y que cada uno tiene que tener su encuentro personal con Dios. Lo único que se puede hacer cuando no tienes fe es desearla y pedirla con humildad.
No nos lo acabamos de creer, pero todo, todo, todo es don.
Fundamental la recomendación de Mala Tierra y muy bueno el testimonio de esos padres.
Besos pelirroja.
Querida Cris, que disfrutéis el sábado de ese gran acontecimientos para toda la familia, aunque con la pena tan reciente de la muerte de la tía de Fernando.
La vida tiene que continuar y es ley de vida desaparecer en algún momento de este mundo, pero la esperanza de que Dios nos espera con los brazos abiertos, nos da la esperanza de que nuestro paso por la vida no ha sido valdío.
Os recordaré de una manera especial el sábado y pediré por tu hijo de una manera especial.
Un besazo grandote, guapa.
Muy bueno el vídeo y tu mensaje. La Fe nos sitúa en un óptica mucho mejor para entender esta vida.
Me gustó mucho para contar a tu hijo en su primera comunión esta entrada de Ana de Por lahfamilia y por la vida http://porlafamiliaporlavida.wordpress.com/2009/05/11/dedicatoria-a-todos-los-ninos-y-ninas-que-reciben-ahora-su-primera-comunion/
Felicidades y muchos besos
Desde luego yo no le encuentro sentido alguno, pero tampoco tengo fe.
Así voy, dando cabezazos...
Besos.
"Y después de decir esto, mientras ellos lo observaban, se elevó, y una nube lo ocultó a sus ojos" (Hechos 1, 9). Es la Ascensión de Jesús al Cielo. Hay un poema de San Juan de la Cruz dedicado a esa nube, no lo recuerdo con exactitud, pero es algo así como: Oh nube cruel, nube sin entrañas, que me privas del amado... Madrid está bochornoso y nublado a ratos.
Felicitaciones Cris por mantener la fe y esperanza en todas las situaciones, no siempre es fácil.
Un abrazo!!
¿cómo va el bebé? ya mero?
Hilda
Pues por la muerte, lo siento. Siempre produce un desgarro.
Por la Primera Comunión, toda mi alegría. Día grande,grande.
Besos al Pack, porque tú ¿todavía no has dado a luz,no,guapa?
Luisa
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